La Reforma Agraria se ha convertido en uno de los propósitos más tangibles del gobierno del presidente Gustavo Petro, porque la tierra en su mala repartición ha sido la causante de los dolores que han vivido miles de colombianos a causa del conflicto armado.
La tarea democrática que ha tenido el Gobierno del Cambio, con relación a la tierra es que esta tenga una equidad en su tenencia y le devuelva esa justicia social a esos campesinos y campesinas que llevan décadas luchando; esa fue la tarea asumida por el actual director de la Agencia Nacional de Tierras, Felipe Harman.
En dos años del gobierno Petro, la ANT ha comprado más de 195.000 hectáreas de tierra para ponerla en manos del campesinado, comunidades negras e indígenas para que fortalezcan sus proyectos productivos, mientras que gobiernos como el de Iván Duque, que en 48 meses compró 13.706 hectáreas y en la era Santos, solo se compraron 3.543 en 23 meses.
En los últimos meses, el director Felipe Harman, de la mano de su equipo de profesionales, han avanzado en este anhelo de país, a través de 5 jornadas maratónicas y masivas que han marcado un avance significativo en la Reforma Agraria, el renacer del campo colombiano y la soberanía alimentaria, donde cientos de asociaciones campesinas, étnicas y de mujeres, hoy pueden decir que son propietarios de la tierra que trabajan y que encuentran en el Gobierno, un aliado para la reivindicación de sus luchas.
Al finalizar el mes de junio, se materializó la compra más grande en la historia del país, donde fueron entregas más de 25.000 hectáreas en 15 departamentos, como cumplimiento no solo a la reforma integral y rural, sino que también, se da un paso clave en el cumplimiento del punto uno del Acuerdo de Paz.
Antioquia, Cesar, Magdalena, Sucre, Meta, Cauca, Bolívar, Huila, Córdoba, La Guajira, Tolima, Cundinamarca, Cauca, Putumayo, y Caquetá, han sido los departamentos que están siendo transformados gracias a la Reforma Agraria, y donde el campesinado está cultivando esa paz total que merece Colombia.
“Que el campesino vuelva a ser dueño de la tierra y vuelva ser dueño de la historia, porque reconocemos el sufrimiento de esta Colombia rural, porque reconocemos que el campesino durante 100 años jamás le tocó, porque reconocemos que todo el mundo le cerraba las puertas en la cara, que había una institucional ciega y sorda ante los reclamos de su pueblo y hemos insistido en que el sueño atesorado de un campesino de ser propietario de la tierra, de tener la posibilidad de brindarle un techo a su familia, sea una realidad. Hoy lo que le queda al campesinado es unidad popular para avanzar”, aseguró Felipe Harman.
Hoy en Colombia existen 15 Zonas de Reserva Campesina y 8 de estas, han sido constituidas en el gobierno Petro.
Así mismo, las comunidades negras e indígenas han sido protagonistas de este avance sustancial para la historia del país. En las últimas jornadas, se ampliaron y se constituyeron 19.000 hectáreas de tierras a resguardos indígenas en 10 departamentos. Además, de las 3.100 hectáreas que fueron formalizadas a 19 consejos comunitarios. Además, de la conformación de 188 comités de reforma agraria, para trabajar de la mano del campesino en las bases que nos permitan materializar este propósito de país.
Dignificamos a El Aro con la entrega de 87 títulos que corresponden a más de 1.700 hectáreas, estas hacen parte de 1.138.593 hectáreas formalizadas durante este gobierno.
Según Felipe Harman: “Estamos entregando tierras a familias rurales para que produzcan, trabajen y vivan en prosperidad”.
La tierra en la actualidad, tiene la función social de producir alimentos para la sociedad, con una mejor justicia social, porque la productividad es el símbolo de la riqueza y de la Paz.